Existe la creencia de que reformar en verano es una buena época para realizar tanto obras parciales como integrales, pero no es del todo cierto.  En España, hay muchas ciudades en las que desde mediados de julio hasta finales de agosto, hace mucho calor y es necesario una fuente de aire a todas horas. Aunque sí es cierto que todo tiene sus pros y contras, y uno de los puntos a favor de una reforma en verano son las horas de luz disponibles.

Otro inconveniente de reformar nuestro hogar en los meses de verano es que las empresas y almacenes cierran y tienen más días no laborables, ya sean de construcción, pintura general, decoración, así como, las empresas de reformas. Por tanto es muy difícil avanzar en las obras de la reforma en casa.

Por todo lo comentado, nosotros recomendamos iniciar las reformas en cualquier momento del año excepto verano; una buena elección sería reformar nuestro hogar en otoño, mayo y junio; o incluso en invierno, pese a las pocas horas de luz. Este último factor no es un impedimento, dado que dispondrás de instalaciones eléctricas.

Sea cual sea la época del año para realizar una reforma, debes obtener la licencia de obras necesaria según el tipo de reforma que vayas a ejecutar.